Un estudiante poco concentrado

Un estudiante poco concentrado llega a su casa a dormir. Despues de su estancia en las tierras de morfeo, este chico prendera la computadora y entrara al infame chat. Conversara con sus amigos, que le aconsejan que no malgaste su rato. "Lo hare" dice el, pero sabe bien que tal vez no lo logre hacer. Promesas incumplidas no son promesas se dice el, asi que sale del chat y al vicio logra vencer.

Lamentablemente, el haber estado frente al monitor su vista ha agotado y morfeo lo vuelve a llamar. Rato despues, con la vista descansada y el animo medio levantado, emprende una vez mas la consecucion de su meta: estudiar. Ha analizado su vida cademica bien, y se ha dado cuenta que estudia mejor tras un duchazo con agua tibia. "Solo seran unos minutos" piensa, pero sabe que el duchazo siempre dura algo mas. El agua cae, el shampoo espuma, el jabon se disuelve en su piel; un proceso simple que nunca falla en abrile la mente.

Sale del baño, y se propone a estudiar de una vez por todas. Pero camino a la copias de derecho civil encuentra al chiquillo que habita en el primer piso de su cada: necesita ayuda en matematicas. "Esta bien, saca tus copias cerdo" le dice nuestro amigo el estudiante de Derecho. Son alrededor de las seis, y tanto haber dormido le permitiran estar despierto hasta pasada las diez. Horas oscuras y silenciosas, las mejores para estudiar segun una profesora del primer semestre. Esta vez el chico le hara caso.

Le piden prender la computadora e imprime una carta notarial. Se avecina una solucion extrajudicial a un conflicto largo. Imprime dos veces y entra a escribir en su blog. No tiene ganas de hacerlo, pero lo hace. ASi que escribira sobre lo mucho que sufre para encontrar tiempo para estudiar.

The End.