miércoles, 17 de junio de 2009

La filosofía y la vida

Desde los albores de la historia, el hombre se ha hecho preguntas. Muchas preguntas: tontas, profundas, revolucionarias, y unas otras sin clasificación; pero al fin y al cabo, preguntas. A su vez, todo este tiempo hasta el día de hoy, el hombre ha formulado respuestas, en mayor número que las preguntas, mucho mayor. Las respuestas a las preguntas más profundas - y al proceso de encontrarlas- filosofía se llamó. Claro, estas respuestas tenían que ser racionales, sino mitos serían o algo por el estilo. Conforme fue pasando el tiempo, y conforme los hombres más fueron conociendo, la filosofía se complicó. Se llenó de palabras enredosas y una que otra contradicción. Pero por otro lado, una que otra respuesta halló.

Todos hacemos filosofía, porque todos nos preguntamos y todos hallamos respuestas. A veces nuestras respuestas no nos contentan, otras veces contentarnos es nuestra respuesta. "¿Qué fin tiene vivir? ¿Qué es el bien y porque tengo que hacerlo? ¿Por qué no todo es eterno?" preguntas que alguna vez nos habremos hecho, y responderlas es probable que haya estado en nuestros esfuerzos. Y conforme respondemos, nuestra vida va cambiando. Giraremos - y no que las respuestas tengan centro de gravitación- en torno a eso: las soluciones a nuestros cuestionamientos. Asi parece ser; y al parecer hoy la respuesta a todo es la indiferencia, giramos alrededor de nada o sino alrededor del placer conseguido con el dinero.

La filosofía - tomada como una ciencia exacta, exactísima- es tortura para quien quiere respuestas simples a sus muchas dudas. Es así que los muchos tratados, compendios, y sistematizaciones de filosofía no por muchos son leídos. Uno, por lo complejo que resulta; dos, por que aplicar las respuesta a la vida no es fuente de gozo, sino de agonía. Creo yo que los filósofos saben esto de su modo de hacer filosofía; pero al parecer les gusta complicarse - y complicarnos- la vida. Tal vez sea por que la pregunta lo amerita, o quizás sea una traba para que ellos puedan ganarse la vida; hago filosofía acerca de su modo de hacer filosofía. Y creo que mis suposiciones son racionales, ¿Cómo la miran?

La filosofía y la vida, de alguna manera van unidas. No son uña y mugre - a veces la filosofía atenta contra la vida- pero lo que la primera concluya acabará cambiando a la segunda. Buscamos saberlo todo; y las razones no están muy escondidas: queremos darle sentido al mundo y también a nuestra vida. Y me he dado cuenta que cuando no le hallamos sentido, todo nos es aburrido, como contar ovejas para quedar dormido. Entonces, podemos concluir que es necesario algún tipo de filosofía; o acabaremos viviendo solo por que sí. ¿Cuál es la mejor de las filosofías? Hay tantas y algunas en poco varían; es conveniente estudiarlas y ver cuál se adecúa a lo que pasa en esta vida. A la que explica sin dejar vacíos, a la que ayuda a vivir bien la vida.

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